martes, 15 de abril de 2008

Campo de Batalla

CAMPO DE BATALLA de Rafael Albertí

Nace en las ingles un calor callado,
como un rumor de espuma silencioso.
Su dura mimbre el tulipán precioso
dobla sin agua, vivo y agotado.

Crece en la sangre un desasosegado,
urgente pensamiento belicoso.
La exhausta flor perdida en su reposo
rompe su sueño en la raíz mojado.

Salta la tierra y de su entraña pierde
savia, veneno y alameda verde.
Palpita, cruje, azota, empuja, estalla.

La vida hiende vida en plena vida.
Y aunque la muerte gane la partida,
todo es un campo alegre de batalla.

4 comentarios:

ybris dijo...

Pues sí.
La muerte parece ganar pero nunca quita que el campo de batalla sea alegre.
Quizás porque la vida siempre hiende vida.

Abrazos.

Soledad Sánchez Mulas dijo...

Siempre me ha doblegado este soneto.
Una batalla, o el amor fecundo,
un deseo de herir, o
un deseo de fundirse el uno en el otro,
la carne en la carne.

La muerte en la batalla,
o la otra muerte para dar la vida.

Alberti deja la puerta abierta a la elección.

¡Ay! Es que es Alberti.

Un beso.

Soledad.

albalpha dijo...

Tratemos que la batalla sea alegre.

Un abrazo
Alba

Gittana dijo...

Rafael Alberti, no lo conozco... perdón por mi ignorancia...